Para influir en las compras de los clientes y aumentar los ingresos, los supermercados deben exponer adecuadamente su mercancía. El material POP, que es esencial en el marketing comercial y debe acompañar a los artículos en los expositores, se utiliza junto con expositores atractivos sin desmerecer la presentación del lineal.
La presentación es el proceso mediante el cual se transforman las ventajas de un producto para el cliente a partir de sus atributos.
Seguir estas 4 indicaciones cruciales puede ayudarle a crear un expositor de productos eficaz e impulsar las ventas:
La cara que vende el artículo
La cara vendedora del producto debe estar bien expuesta, es decir, debe estar hacia el campo de visión del espectador. En pocas palabras, la parte delantera del producto debe estar orientada hacia el cliente. Puede parecer aparente, pero si prestamos atención a las estanterías de los supermercados, nos daremos cuenta de cuántos artículos están al revés o al derecho.
La superficie que ocupa un producto en la parte delantera de un estante o expositor se denomina frente.
El límite perceptivo
Es la duración mínima que debe tener cualquier producto. Se aconseja tener al menos tres caras, pero si los objetos son demasiado grandes o demasiado finos, la longitud debe ser de 20 cm para que se vean.
Por tanto, es necesario que un producto tenga un espacio mínimo en el estante para que el comprador pueda fijarse bien en él.
La zona de un establecimiento comercial que se utiliza para exponer los productos que se ponen a disposición de los clientes se llama estantería.
No debería haber ninguna falta de existencias
Cuando hablamos de falta de existencias, nos referimos a cuando no hay artículos disponibles para la compra en el punto de venta porque se han agotado. Incluso algo que parece tan sencillo puede tener efectos de largo alcance, por ejemplo:
- Los clientes podrían cambiar de minorista. Buscarán en otras tiendas si en ésta no encuentran los artículos que buscan.
- Si la rotura de stock se produce con frecuencia, puede dañar la reputación de la empresa y de la marca.
- El minorista malgasta dinero en un espacio vacío. Cualquier producto puede aprovechar un espacio vacío en el estante, lo que aumenta la probabilidad de que el minorista realice más ventas.
Evite llenar demasiado el estante
El comprador puede creer que nadie adquiere el producto si la estantería está abarrotada. Para evitar esa impresión desfavorable, es preferible dejar a propósito huecos entre una o dos mercancías.
Por último, pero no por ello menos importante, la mercancía debe parecer estable y no dar la sensación de que está a punto de caerse. Una presentación adecuada permite a los minoristas aumentar las ventas.